Informa: Daniel Maldonado Aguirre
Mario Álvarez Pacheco, ganadero fallecido hace muchos años, ha dejado su nombre en todo lo alto y toda la afición del Cusco y del Perú lo recuerda por esos legendarios toros que pastaban en los cerrados de Lacaya, Chocoyo y Yavi Yavi, como el toro "Payaso", indultado por Paco Céspedes (padre), el toro "Teniente", "El Coco", "El Azucarero" y muchos otros que marcaron historia en las páginas de la tauromaquia.
La última semana del mes de enero, el viernes 20, nos dirigimos por la ruta del Ccapac ñan (camino de ricos) en la época del inca y encontramos una vista panorámica, Queswachaca, en la ruta a Livitaca, en Chumbivilcas (Cusco), donde se celebra cada año el festejo al patrón San Sebastián con festejos taurinos, en esta oportunidad echaron seis toros de Lacaya, un gran lote de los Pinedo Álvarez y con tal mala suerte encontramos una decena de toreros prácticos sin ideas y sin clase para plantear la faena. Lo mismo ocurrió con los toreros prácticos (toreo a caballo), no encontramos temple, ni maestría, excepto, un alazan tostado (colín) que trato de ser protagonista de la tarde.
No podemos cansarnos de decirlos para un buen toro, un buen torero, y un artista con capote en la mano es un portento de facultades y una espectacularidad toreando, no un violín destartalado que rompe la armonía de la tarde. Esperamos que al próximo año así como se echan toros de calidad se lleven toreros de cartel para resaltar la fiesta taurina.
Foto: Puente del camino inca.
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